En ELE-EME transportamos todo tipo de material radiactivo, bajo las estrictas reglas y protocolos marcados por la C.N.S.N.S. Su seguridad es primero.
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El transporte de material radiactivo representa sólo una pequeña fracción del total, ya en el año 1985 el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) de las Naciones Unidas estimaba que se transportaban cada año más de 10 millones de bultos que contenían materiales radiactivos. Este número ha ido creciendo en los últimos años.
El transporte de material radiactivo dentro del territorio nacional se rige por las disposiciones y normas establecidas por la C.N.S.N.S. basadas REGLAMENTO para el Transporte Seguro de Material Radiactivo, publicado en el DOF 10/04/2017 en el que se señalan las reglas para el transporte. Todo material radiactivo que se transporte debe empacarse apropiadamente, lo cual está en función de la cantidad y las características de cada material, los cuales existen 3 tipos, de formas especiales, de baja actividad y/o sólidos de baja actividad especifica.
El embalaje consiste en uno o varios recipientes de materiales absorbentes, estructuras de separación, material de blindaje contra las radiaciones, dispositivos de refrigeración, de amortiguamiento de golpes y aislamiento térmico. El tipo de bulto, se entenderá el embalaje junto con su contenido radiactivo.
Embalaje +Material radiactivo = Bulto
En base a la combinación en los índices de radiación y de transporte, se definen las categorías para los bultos, las que son, I-BLANCA, II-AMARILLA o III-AMARILLA. Según su categoría, todo bulto que contenga, material radiactivo debe llevar como mínimo dos etiquetas.